Karen Paola y la Gala de Viña 2025

Karen Paola arremete contra la organización de la Gala de Viña 2025: "Una falta de respeto, sentí que estaba estorbando"

La Gala de Viña 2025, uno de los eventos más esperados del año, ha sido escenario de una nueva controversia, esta vez protagonizada por la cantante y figura de la música chilena, Karen Paola Bejarano. La artista, conocida por su estilo auténtico y sin filtros, no dudó en manifestar su frustración y malestar con la organización del evento, asegurando que su experiencia en la gala fue todo menos placentera. Con una crítica contundente y cargada de emociones, Bejarano hizo públicas sus quejas sobre el trato recibido durante el evento, algo que dejó a muchos sorprendidos y, en algunos casos, indignados.

El retraso y la falta de consideración

La molestia de Karen Paola comenzó con un hecho que, para ella, resultó inaceptable: el retraso significativo en su participación. Según la cantante, ella había sido informada de que desfilaría por la alfombra roja de la Gala de Viña a las 22:30 horas, pero lo que parecía ser un compromiso puntual terminó convirtiéndose en una espera interminable. "Terminé desfilando casi a las dos de la mañana", reveló en una de sus declaraciones. Para Bejarano, esta demora no solo fue una falta de organización, sino una falta de respeto hacia ella y su tiempo, que claramente no fue considerado por quienes estaban a cargo de la logística del evento.

Una espera incómoda e interminable

Pero el problema no terminó ahí. La cantante, en su relato, destacó que la experiencia fue aún más desagradable debido a la falta de atención que recibió mientras esperaba su turno. "Estuve de pie todo ese rato, sin siquiera un lugar donde sentarme. Fue angustiante", expresó en un emotivo video en vivo a través de su cuenta de Instagram. Según Karen Paola, esta situación no solo la incomodó a ella, sino que reflejó una falta de empatía por parte de los organizadores del evento hacia los artistas presentes.

El sentimiento de exclusión y desprecio

Lo más impactante de las declaraciones de Bejarano fue el profundo sentimiento de exclusión que experimentó durante la gala. "Me sentí ajena, me sentí en un lugar en el que estaba estorbando, sentí que no pertenecía", aseguró, aludiendo a una desconexión total con el ambiente del evento. Para Karen, la Gala de Viña, un evento que debería ser una celebración del arte, la cultura y el trabajo de los artistas, se convirtió en un espacio hostil y poco acogedor.

La artista también dejó claro que, de haberse sentido realmente como una invitada importante, habría recibido un trato acorde a la relevancia del evento. "Y, claramente, parece que no pertenezco. Y está bien no pertenecer, pero entonces no me inviten si no quieren hacerme pasar", agregó, dejando en evidencia su descontento con lo que consideró una invitación vacía y sin el respeto que ella esperaba recibir.

El trabajo de los artistas y los diseñadores olvidado

Otro aspecto que Karen Paola resaltó fue la inversión y el esfuerzo detrás de su participación en la gala, tanto personal como profesional. La cantante señaló que, al igual que otros artistas y creadores, había invertido tiempo, esfuerzo y recursos para estar en la Gala de Viña, no solo por el honor de ser parte del evento, sino también para mostrar el trabajo de los diseñadores y orfebres chilenos. "Para ir a la Gala de Viña hay una inversión de tiempo, trabajo y de muchas cosas que quizás, para muchos de ustedes, no son importantes. Pero son estos momentos en los que los diseñadores y orfebres chilenos muestran su trabajo", expresó. Para Karen, este tipo de eventos representan una vitrina importante para los diseñadores y artistas que ponen todo su empeño en crear algo único para la ocasión. Sin embargo, lamentó que este esfuerzo no fuera valorado adecuadamente por la organización del evento.

La necesidad de expresar su frustración

La cantante dejó claro que, aunque suele tomar las cosas con humor, no estaba dispuesta a dejar pasar lo que consideraba una grave falta de respeto. "Siempre me tomo las cosas con mucho humor, pero cuando son faltas de respeto así de grandes, no solo para mí, sino que para todos los que estaban ahí, hay que decirlo", afirmó. Con estas palabras, Bejarano no solo expresó su malestar por su propia experiencia, sino que también se solidarizó con otros artistas y asistentes que, según ella, pudieron haber vivido situaciones similares.

En este sentido, la cantante hizo un llamado a la organización del evento para que en el futuro se tomen más en serio las necesidades de los artistas y se les brinde el respeto que merecen. "Nosotros netamente somos una persona que desfila su trabajo. Eso es lo que me da pena a mí, que se pasen eso por cualquier parte", expresó, dejando claro que su participación en la Gala de Viña no era solo un favor, sino una oportunidad para mostrar el trabajo de otros talentos y un esfuerzo que no debe ser menospreciado.

Una crítica sin filtros y con responsabilidad

Finalmente, Karen Paola asumió la responsabilidad de sus palabras y dejó claro que no se retractaría de su crítica. "Yo ya soy una mujer grande y me hago responsable de todo lo que acabo de decir", aseveró. Con esta frase, Bejarano cerró su desahogo, reafirmando que, aunque su intervención podría haber sido polémica, la sentía necesaria para poner de manifiesto lo que, según ella, fue un grave error de organización que afectó tanto a los artistas como a los asistentes.